Los proveedores de energía son llamados a lograr resultados de crecimiento que, según un informe de Accenture, rondarán los 240 billones de dólares en 2023.

Las empresas que adopten un enfoque más dinámico, ágil e interactivo, transformarán el concepto del ‘living business’ o negocio viviente, lo que según el estudio, requiere el mercado.

La investigación, que evaluó a más de 70 mil clientes de 42 marcas alrededor del mundo, de las cuales 36 eran empresas energéticas, sugiere que el mercado energético global alcanzaría los 240 billones de dólares para 2023, lo que indica un crecimiento del 15% actual.

Este crecimiento se daría por las nuevas oportunidades de negocio que abrirán productos y servicios como los vehículos y edificios inteligentes, que crearán ciudades energéticamente conectadas.

El cambio sería tal que, mientras que la energía al por menor normalmente aporta el 10% de ingresos totales de la industria a nivel global, las predicciones a 2030 señalan que esas nuevas oportunidades de ingresos se elevarán al 25%. Para lograr esta ventaja, el estudio les recomienda a las empresas de energía comenzar a liberar valor de los dispositivos y servicios conectados transformándolos en datos, ofertas de clientes y nuevas fuentes de ingresos.

Lo anterior, porque, según ellos, las compañías que se centran en la experiencia serían más confiables y vistas como verdaderas socias del cliente.

Además, los proveedores de energía necesitan fomentar relaciones de doble sentido para abordar a los nuevos participantes del mercado y debe existir una convergencia de la industria.

El proceso debe hacerse considerando los nueve momentos clave del servicio al cliente, incluyendo registro, servicio y comunicación”, dice el informe.

A renglón seguido concluye que “los consumidores de mercados competitivos que mejor valoraron el servicio recibido, son 20% más propensos a permanecer con su actual proveedor, 37% más propensos a recomendarlo y están en promedio 22% más satisfechos”.

Entre los caminos que deben tomar las empresas energéticas para ser proveedoras inteligentes hay tres que “fomentan el cambio y aportan experiencias más satisfactorias que garantizan un crecimiento sostenido”, dice el documento.

La primera es la aplicación de la inteligencia artificial posibilitando un servicio eficiente. 

La segunda es la personalización, para así ofrecer un servicio relevante, y la tercera, se centra en la experiencia del usuario, con la idea de, no solo cumplir sus expectativas, sino excederlas.

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