Pese a tener una tasa de cambio favorable, el sector de cosméticos registra crecimiento negativo en sus exportaciones con una tendencia que se ha mantenido desde el año 2014.

Lo anterior se explica principalmente por la concentración de las ventas a los países de la Comunidad Andina de Naciones y Venezuela, los cuales han disminuido los volúmenes de compra exterior de estos productos por diferentes motivos, por ejemplo, Ecuador, que mantiene una salvaguardia a los perfumes; Perú, que presenta alta devaluación y ello ha desmotivado las importaciones; y, Venezuela, cuyos problemas políticos y económicos son bien conocidos.

Bajo este panorama, el empresario nacional necesita diversificar mercados o ganar mayor posicionamiento en un mercado local que está creciendo pero que a la vez se está haciendo más competido. Según cifras de la ANDI, mientras en 2014 un colombiano gastaba en promedio US$49 en este tipo de productos, se calcula que en 2015 la cifra fue de US$79; este crecimiento en el consumo hace más interesante al mercado nacional, al punto que las importaciones siguen creciendo y la presencia de multinacionales se hace más evidente.

Por ello, para mantenerse vigentes, las empresas enfilan sus estrategias hacia el mercado interno y a partir de esto tener herramientas suficientes para tratar de animarse a explorar mercados internacionales, razón por la cual eventos como la Feria de Salud y Belleza , que se realizará este mes de agosto, constituye una interesante plataforma que les permite atender estas dos perspectivas: encontrar una variedad de compradores nacionales que se acercan a ver las últimas tendencias del sector y, además, tener la posibilidad de identificar compradores internacionales en las diferentes ruedas de negocio y espacios de networking que se promueven desde la Feria.

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