Mientras el debate sobre una posible crisis del sector textil y de confecciones continúa, datos muestran que pese a la incertidumbre, más empresas se están creando y menos se están liquidando en esa industria.

De acuerdo con cifras que pudo conocer Portafolio, a través de la Confederación Colombiana de Cámaras de Comercio (Confecámaras), entre enero y julio de este año se han inscrito unas 860 nuevas organizaciones, versus las 737 que nacieron en el mismo lapso del 2016 y las 696 del 2015, según el Registro Único Empresarial y Social (Rues). 

Y el dato de las compañías cerradas es aún más sorprendente, pues en el primer semestre de este año se han acabado unas 129 sociedades, mientras que en el mismo periodo del 2016 fueron 172, lo que significó una caída del 25% en el número de empresas canceladas.

El caso de las personas naturales registradas en el Rues es también positivo, pues en dicho lapso del 2017 se han reportado unas 3.515 inscripciones, frente a las 3.169 del año pasado y las 2.947 del 2015.

Asimismo, el número de cancelaciones en dicho segmento ha venido en bajada, pues en el primer semestre –a julio– ascendió a 2.202, mientras que en 2016 las personas naturales que se salieron del negocio fueron 2.827.

Para Carlos Botero, presidente de Inexmoda, aunque la industria esté pasando por momentos difíciles este tipo de indicadores muestran que el sector sigue siendo dinámico. “Ya estamos trabajando en varias estrategias con los empresarios, para volver al sector más productivo y que pueda mejorar. Y esta clase de compañías nuevas son un buen síntoma”, le dijo a este diario Botero.

Igualmente, aseguró que aun así espera un mejor segundo semestre. “Aunque no será espectacular, definitivamente superará los indicadores del primero”, anunció.

A su turno, Aaron Szapiro, empresario y miembro de la junta directiva de la Cámara Colombiana de Confecciones y Afines (CCCyA), manifestó que el aumento de empresas creadas no necesariamente significa que sean compañías que le sumen a las ventas del sector. “Puede que hay pequeñas y medianas organizaciones que estén naciendo. Sin embargo, no es posible saber si tienen grandes volúmenes de ventas”, aseveró.

De igual manera, afirmó que todavía queda mucho trabajo por hacer para que la industria vea una mejora en sus indicadores. “Somos el 14% de las firmas del sector industrial y uno de los que más genera valor agregado y de los que más baja han reportado su productividad. Una de las principales dificultades que hay es que la mano de obra en el país no es competitiva”, comentó el directivo, quien también enfatizó que el cambio de la modalidad de arancel mixto, les ha dado la posibilidad a más empresas de importar, en vez de priorizar el talento humano en el país. “No se puede decir que queremos ser proteccionistas pero sí queremos fortalecernos”, señaló.

De hecho, un informe que socializó Fenalco la semana pasada, en conjunto con el consultor empresarial Hernando José Gómez, dice que hay una baja inversión y una mano de obra menos calificada. El estudio indica que por cada 6,3 obreros u operarios, hay un técnico o un tecnólogo mientras que la relación en promedio de la industria manufacturera es de 4,1.

Aun así, pese a las dificultades, la Cámara de Algodón, Fibras, Textiles y Confecciones de la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia (Andi) prevé una mejora a partir de los esfuerzos que están haciendo el sector público y el privado para reactivar la economía.

Juliana Calad, directora de la Cámara, manifestó que “las medidas que está tomando el Gobierno nos abren un camino muy esperanzador, el cual esperamos se concrete en mejores condiciones que nos permitan construir competitividad”.

Además, indicó que desde el gremio tienen plena seguridad que dichas acciones van a repercutir en unas cifras muy positivas para esta cadena productiva.

“Invitamos a todos los colombianos a seguir creyendo en nuestra industria nacional y a consumir más productos elaborados en Colombia”, concluyó Calad.

Tomado de: diario  Portafolio